Final con toque dramático a la presencia de Pedro Sánchez en el Congreso de los Diputados horas antes de la segunda votación en la sesión de investidura.
Pedro Sánchez dijo que su decisión se debe a su "profundo desacuerdo" con la decisión del Comité Federal de facilitar la investidura de Mariano Rajoy. "No iré contra mi partido ni iré contra mi compromiso electoral", fueron sus razones.
"De las dos opciones que me da la Gestora, no escojo ninguna", avanzó. No expuso explícitamente su intención de presentarse a las primarias socialistas pero sí ha anunciado que, a partir del lunes, "cojo mi coche para recorrer todos los rincones de España para escuchar a los militantes".
Muy emocionado, al borde de las lágrimas y con los ojos enrojecidos, no admitiendo preguntas, ha pedido disculpas "por los errores que haya podido cometer" y ha pedido a la Gestora, con la que ha sido muy crítico, que no expulse a aquellos diputados que decidan mantenerse en el no a Mariano Rajoy.
"Sería un error", dijo, antes de defender expresamente a los parlamentarios catalanes "Somos muchos los que defendemos al PSC, en el PSOE no sobra nadie”. Su intervención supuso un ataque frontal a Javier Fernández, a quien no citó. Sí pidió la inmediata dimisión de la Comisión Gestora y la convocatora urgente de un congreso del Partido Socialista Obrero Español.
Sus próximas revelaciones llegarán este domingo, en el programa Salvados de Jordi Évole.
– Ver también, Santamaría, Cospedal, Rudi, Báñez y Teófila, el plan que medita Rajoy (Hechos de Hoy)