Cristiano Ronaldo logró con sus dos goles el triunfo para el Real Madrid en la Supercopa de Europa. No fue sin embargo una victoria personal. El Real Madrid emergió por primera vez con fuerza como un conjunto coral con las aportaciones muy importantes de Toni Kroos y James Rodríguez sabiendo que cuenta en el banquillo con Keylor Navas que ha deslumbrado con su rápida adaptaciçon y sensacional estado de forma.
Por todo ello, Carlo Ancelotti aseguró, en su balance del partido, que puede empezar un ciclo importante. "Tenemos una plantilla de gran calidad. Tengo la suerte de entrenar una plantilla fantástica, aunque tendremos que entrenar mucho y sacrificarnos", apuntó en su conferencia de prensa. Alabó a Toni Kroos y James Rodríguez, y destacó la figura de Cristiano Ronaldo.
El Real Madrid no ha cerrado su temporada de fichajes pero tampoco de salidas. Puede haber sorpresas todavía en las dos direcciones, se aseguró a Hechos de Hoy en fuentes de operaciones que están sobre la mesa, apuntando sobre todo a Ángel Di María. Carlo Ancelotti no lo quisiera pero respeta las decisiones del club. Su impresión tras el gran partido del Real Madrid es la de que se abren rotaciones por lo que no se va aproducir un once fijo en toda la temporada. Es un mensaje general, y una respuesta al escándalo de algunos medios que criticaron con dureza la presencia de Khedira en el banquillo. Supone también un recordatorio a Iker Casillas, que firmó una gran actuación, pero tiene un rival de categoría y fuerte personalidad com Keylor Navas.
Una victoria rotunda
El Real Madrid se proclamó campeón de la Supercopa de Europa después de vencer al Sevilla por 2-0 en la final disputada en Cardiff (Gales), en un choque en el que el protagonista fue Cristiano Ronaldo, autor de los dos tantos de un partido que el actual campeón de Europa dominó de principio a fin.
En un escenario en el que parecía predestinado a reinar Gareth Bale, Cristiano demostró que su hambre sigue intacta y fue crucial para que la Supercopa de Europa viajase a Madrid por segunda vez en la historia. Un trofeo que corona la vitrina personal de Cristiano, ya que era el único que no había ganado a nivel de clubes.
El actual Balón de Oro desniveló la balanza con dos tantos, uno en cada parte. En el primero aprovechó un gran centro de Bale, que a pesar de no marcar –Beto se lo impidió en el minuto 93- fue una amenaza constante con su potencia y velocidad; el segundo, en el inicio de la segunda parte, el 7 madridista reventó a Beto con un disparo marca de la casa.
Y pudo acabar con un hat-trick, unos minutos antes del primero, en una acción en la que fueron cruciales dos de los mejores jugadores del Real Madrid en el partido: Toni Kroos y Karim Benzema. El alemán, con solo una semana de entrenamientos, dio una clase magistral de fútbol en su debut como jugador blanco; el galo hizo lo que siempre hace: asociarse, combinar, asistir y crear peligro.
A Kroos y Benzema se les unieron un gran Luka Modric desde su posición de interior y un buen James Rodríguez en su debut -también jugaría Isco en la segunda parte- para que el Real Madrid mostrara una versión dominante desde la creencia de tener el balón, de dominar el juego y de ser protagonista.
Eso sí, sin renunciar al contraataque, su arma más letal de los últimos años y en la que Cristiano y Bale siguen siendo armas nucleares. La buena noticia para los blancos es que el juego veloz y vertical, de seguir sobre la línea trazada en Cardiff, seguirá siendo importante pero no será el único as en la manga de los de Ancelotti.
Solo pasó problemas el campeón de Europa en los momentos posteriores al primer gol. Después de media hora buscando el primer tanto, los de Carlo Ancelotti se relajaron y el Sevilla pasó los siguientes minutos cerca del área madridista. En ese rato tuvieron una clara ocasión para conseguir el empate.
Pero apareció Iker Casillas. Después de una final de Liga de Campeones, un Mundial y una pretemporada desacertadas, el guardameta hizo en la Supercopa de Europa lo que ha hecho en la mayor parte de su carrera: aparecer cuando su equipo le necesitaba. El capitán madridista salvó un mano a mano a Carriço, que se quedó delante de él después de un error defensivo de Coentrao.
Más allá de esos minutos, y de un tramo muy al final en el que se volcó sobre la meta blanca para hacer el gol del honor, el Sevilla mostró en Cardiff lo que había dicho su entrenador que harían en la rueda de prensa del lunes: ambición, sobriedad y seriedad defensiva y ánimo de atacar cuando tenía la oportunidad.
A falta de un hombre que sustituya a Ivan Rakitic en la generación del juego y quizás de un lateral que supla a un Alberto Moreno, que se va al Liverpool y que se despidió llorando de su equipo al final del partido, el campeón de la Europa League vuelve a tener mimbres para dar mucha guerra a los grandes en España y en Europa.
Sin embargo, este martes, sus armas no fueron suficientes para evitar que el Real Madrid empiece el año en la temporada en la que afronta el reto de ganar seis títulos. De momento, los blancos han tachado el primero de la lista. El Real Madrid, doce años después, vuelve a ser supercampeón de Europa.
Ficha técnica
– Resultado: REAL MADRID, 2 – SEVILLA, 0 (1-0 al descanso).
– Equipos: REAL MADRID: Iker Casillas; Carvajal, Ramos, Pepe, Coentrao (Marcelo, min.84); Kroos, Modric (Illarramendi, min.86), James (Isco, min.72); Cristiano Ronaldo, Bale y Benzema.
SEVILLA: Beto; Coke (Diogo Figueiras, min.84) Fazio, Pareja, Navarro; Carriço, Krychowiak, Vitolo; Vidal (Iago Aspas, min.66), Suárez (Reyes, min.78) y Bacca.
– Goles: 1-0, min. 29, Cristiano Ronaldo.
2-0. min. 49, Cristiano Ronaldo.
– Árbitro: Mark Clattenburg (Inglaterra). Amonestó a Carvajal (min.45) y Kroos (min.53) por parte del Real Madrid; y a Vitolo (min.42) y Fernando Navarro (min.66) por parte del Sevilla.
– Estadio: Cardiff City.