Los hermanos Pau y Marc Gasol serán los grandes ausentes este viernes en el Teatro Campoamor de Oviedo, que acogerá la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, presididos por los Reyes de España, Don Felipe y Doña Letizia y la Reina Doña Sofía. También se ha confirmado que la Princesa de Asturias, Leonor, de 10 años, no asistirá en Oviedo a la entrega de los premios que llevan su nombre.
En esta edición, la 35ª de los galardones que organiza la Fundación Princesa de Asturias, no habrá entrega del Premio de los Deportes 2015, que recayó en los hermanos Gasol. Aunque desde la Fundación han confirmado que su padre, Agustí Gasol, estará en Oviedo, nadie va a recoger el galardón en nombre de los deportistas en el escenario.
Sí se entregarán el resto de galardones, comenzando por el de Comunicación y Humanidades (Emilio Lledó), Cooperación Internacional (Wikipedia), Ciencias Sociales (Esther Duflo), Concordia (Orden Hospitalaria de San Juan de Dios), Investigación Científica y Técnica (Emmanuelle Charpentier y Jennifer Doudna), Artes (Francis Ford Coppola) y Letras (Leonardo Padura). Todos estarán en el escenario y recibirán su galardón de manos del Rey Felipe VI.
Pau y Marc Gasol anunciaron que no asistirán a la ceremonia de entrega de los Premios por la proximidad del inicio de la temporada NBA, el 27 de octubre. Sus equipos, los Chicago Bulls y los Memphis Grizzlies, mostraron su preocupación por el efecto que podrían tener dos desplazamientos tan largos. Se da la circunstancia de que ambos ya recogieron el mencionado galardón en 2006, al haber sido galardonados como miembros de la selección española de baloncesto, junto al resto de compañeros.
En ausencia de los Gasol, Francis Ford Coppola se ha convertido en el premiado más buscado tanto por la prensa como por los ovetenses. A su llegada a Oviedo, el miércoles, fue recibido con la música de El Padrino interpretado por gaitas. Este jueves fue la gran estrella en una rueda de prensa muy interesante.
El cineasta estadounidense afirmó que Hollywood "no existe" y no hay una línea cinematográfica como tal. Por eso se refirió a la industria del cine en general a la que criticó por no asumir el "riesgo" de la creación artística, coincidiendo con la postura de Steven Spielberg sobre el exceso de películas de superhéroes. Aseguró que "los estudios tienen aversión al riesgo" y afirmó que "hacer arte sin riesgo es como intentar hacer hijos sin hacer el amor".
Pero no sólo habló de cine. Coppola también mostró su preocupación por la situación de los refugiados sirios. "Destroza el corazón", aseguró en referencia a la crisis que se está viviendo. Y también habló de la corrupción como "una enfermedad a la que no se puede sobrevivir, hay que acabar con ella, y se puede".
De lo que no dio ni una pista es sobre sus próximos proyectos.