El FC Barcelona hizo los deberes antes del derbi madrileño arrollando (5-1) al Athletic Club de Bilbao en el duelo correspondiente a la decimocuarta jornada de la Liga, disputado este sábado en el Camp Nou, donde Messi volvió a brillar con un doblete, escudado por la calidad de Xavi, Cesc e Iniesta, para fortalecer el liderato antes del choque entre los dos perseguidores.

Los de Tito Vilanova barrieron a los de Marcelo Bielsa. Los vascos apenas inquietaron a Valdés y no pudieron evitar el vendaval local, con lo que suman su tercera jornada seguida sin vencer. Por su parte, el Barcelona sumó un nuevo triunfo liguero, 40 puntos en el liderato, el mejor arranque de la historia de la competición.

El Barça salió con intensidad y presión, pero tras unos minutos de nervios el Athletic logró plantarse bien atrás para evitar las internadas locales. Hasta el minuto 13, los de Vilanova no lograron probar a Iraizoz con un lanzamiento de Iniesta. Los bilbaínos parecían seguros en su formación, pero un fallo en un despeje abrió el primer hueco.

Iniesta no se entendió con Messi para aprovechar la contra, pero en el córner que dejó la jugada llegó el primer tanto culé. En uno de los pocos saques de esquina colgados al área, Piqué aprovechaba el balón suelto tras un remate de Cesc para poner por delante a los suyos (1-0).

El show de Messi

Los azulgranas sacaron petróleo del desconcierto en su rival volviendo a la intensidad del inicio. Xavi vio la mala colocación de la defensa vasca para habilitar a Messi con un pase medido. El argentino no perdonó (aunque Amorebieta terminó de meter el gol) para poner tierra de por medio (2-0) y quedarse a dos goles de los 85 de Müller en un año natural.

Con Jordi Alba y Adriano muy participativos por las bandas, el Barcelona terminó de volcarse, sin tener además ninguna tentativa visitante que hiciese recular las intenciones arriba. Messi lanzó el balón al larguero al borde del descanso pero aún así en una nueva ocasión, Adriano puso el 3-0 antes de coger el camino de los vestuarios.

El buen hacer de Xavi y Cesc en el centro del campo mareó al Athletic, y en la segunda mitad el guión siguió igual. Con más cabeza aunque con el mismo hambre, los locales dominaron el esférico buscando la portería de Iraizoz. De esta forma llegó el cuarto de la noche en los pies de Cesc, en una incorporación por la derecha asistida por Iniesta (4-0).

Heridos en su orgullo pero casi impotentes, el Athletic intentó reponerse. Fernando Llorente, que había entrado tras el descanso, tuvo entonces la primera ocasión del partido para los de Bielsa y, poco después, llegó el gol de la honra de Ibai. Sin embargo, el tanto obligó a los de Vilanova a dar un plus final, y Messi redondeó la goleada con un nuevo tanto en su abultada cuenta particular (21 en Liga, 84 este año).