Las tendencias gastronómicas surgen y se desvanecen, aunque todos sabemos que muchos platos llegan para quedarse. La comida árabe está teniendo mucho éxito entre las ciudades más cosmopolitas de Europa, sobre todo en la capital inglesa, Londres, donde se pueden encontrar restaurantes dedicados a la cocina marroquí, libanesa, palestina o incluso a la turca.

Esta tendencia está creciendo y cada vez podemos ver más platos de origen árabe tanto en restaurantes de comida vegetariana como en locales dedicados a difundir esta dieta milenaria. Si quieres conocer sus platos típicos más reconocidos a nivel global, tan solo tienes que seguir leyendo este artículo.
 

 _{Foto: Pixabay}

Hummus: puré de garbanzos
 
El hummus es un plato de origen libanés, palestino o incluso israelí y es que su procedencia no está muy clara, lo que sí está claro es su sabor y textura que hace de este un plato delicioso para acompañar con otros alimentos. Esta crema de puré de garbanzos también lleva limón, piñones, puré de semillas de sésamo y dependiendo de la zona, lo puedes encontrar con otras especies e ingredientes.
 

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Falafel: presente en el mundo árabe
 
Estas bolas hechas con una base de garbanzos son similares a las albóndigas o a las croquetas, los puedes comer tanto en frío como en caliente y suele ir acompañado de salsa de yogurt o hummus. Su procedencia es de Oriente Medio, Pakistán e India, aunque está extendido en los países árabes donde cada uno tiene una variedad diferente. Este alimento lo puedes encontrar incluso al pedir comida árabe a domicilio, ya que se está convirtiendo en un plato muy popular.
 
Cuscús: plato marroquí
 
Este plato tradicional del norte de África o bereber está hecho a base de sémola de trigo y va acompañado con verduras, carnes y especias. El más común es el que lleva ternera, garbanzos y verduras variadas como la zanahoria, además de otros ingredientes. Se dice que procede principalmente de Marruecos ya que se ha convertido en un plato icónico del país, reconocido mundialmente.
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Kibbe: icono libanes
 
Su nombre en árabe es kibba y es el plato nacional del Líbano, aunque también se puede encontrar en otros países de Oriente Medio y del Cáucaso además de Armenia. Es una albóndiga, con textura de croqueta y forma de balón de rugby, que tradicionalmente se elabora con pasta de un cereal llamado bulgur y combinado con carne, cebolla y sazonado con pimienta.
 
Baklava: bombones turcos
 
Este dulce está presente en muchas gastronomías, por no decir en todas, aunque su origen esté en Turquía. En la cocina árabe los baklavas son especialmente dulces y muy nutritivos. Se pueden encontrar en diferentes formas como cuadrados, rectángulos o rombos, se elaboran a base de frutos secos, especialmente de almendra, y se acompañan con miel además de una masa tipo hojaldre, ideal para acompañar con té o café.
 
La gastronomía árabe está llena de sorpresas muy saludables y cada vez están conquistando más cocinas alrededor del mundo. Quizás sea porque son comidas variadas, sencillas y llenas de nutritivos ingredientes, lo que es seguro es que ¡nos encanta!