En Cartagena de Indias, bajo el liderazgo de Colombia, la Alianza del Pacífico emerge con toda su ambición desde su constitución el 2011. Juan Manuel Santos (Colombia), Ollanta Humala (Perú), Enrique Peña Nieto (México) y Sebastián Piñera (Chile) han querido robustecer la voluntad política y económica del momento fundacional así como su primera apertura a un nuevo miembro, Costa Rica, con la presencia en Cartagena de Indias de Laura Chinchilla.

Santos, Humala, Peña Nieto y Piñera firman en esta cumbre el protocolo de adhesión de Costa Rica como integrante de pleno derecho. Es el comienzo de un proceso para la incorporación de Costa Rica, que el próximo 8 de mayo tendrá un nuevo presidente tras la segunda vuelta electoral del 6 de abril. En la actualidad el número de observadores ascienden a 25. Panamá, después de Costa Rica, desea su adhesión a esta organización.

En esta cumbre se establece la eliminación del 92 % de los aranceles y la desgravación paulatina del 8 % restante, en su mayoría productos agrícolas a excepción del azúcar, con salvaguardas de hasta 17 años. Además ya se ha logrado el libre tránsito de los ciudadanos entre los cuatro países, se han puesto en marcha los programas de becas y se comienzan a compartir las sedes diplomáticas y comerciales en países asiáticos y africanos. La cumbre de Cartagena de Indias, como informó Hechos de Hoy, ha sentado las bases de un relevante acuerdo de seguridad entre Colombia y México.

La Alianza del Pacífico representa el 36 % del Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina y tiene un promedio de crecimiento económico anual del 5 %, además de un mercado de 212 millones de habitantes. Su vocación es lograr la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas, pero también es expandir su potencial hacia la pujante región de Asia-Pacífico.