Un patrimonio neto de 205.609 millones de euros. Eso es lo que suman las doscientas personas más ricas de España: un 16% más que hace un año y 74.000 millones más que hace apenas cinco años. Así es el balance de la décima edición de Las 200 mayores fortunas españolas, el monográfico que publica El Mundo anualmente sobre las grandes riquezas de nuestro país.
La cifra total equivale al 19% del PIB de 2015 y explica la capacidad más que singular de los que acumulan y acumulan riqueza, mientras gran parte de la población sigue afectada por la crisis. En España existen cuarenta fortunas con un patrimonio superior a 1.000 millones de euros y otras cuarenta más que también superan los 500 millones.
Cabe también resaltar que excepto Julio Iglesias y la baronesa Thyssen, todos son grandes empresarios y herederos de fortunas increíbles. Como es ya tradición, en la cabeza está Amancio Ortega, que en un solo un año ha aumentado su patrimonio con 16.336 millones más gracias al filón de todos sus talismanes de Inditex, aunque sobre todo destaca Zara.
“En 2015 repartió un dividendo récord, facturó más que nunca y Amancio siguió comprando más inmuebles que nadie. Su inmobiliaria, ya acumula 7.300 millones en edificios, los mejores que ofrece el mercado en cada momento”, explican desde El Mundo.
Asimismo, las dos listas que publica, dividida en: los ricos de la bolsa y las fortunas privadas que no cotizan, añaden 22 caras nuevas. La más llamativa es la del magnate Guillermo Fierro Eleta, emparentado con los Botín y patrono de la Fundación Príncipe de Asturias, pero que casi nadie conoce, incluso los de la prensa económica. Es un rostro realmente importante ya que controla seis bancos, destila ron, perfora pozos de petróleo, fabrica tapones de Coca-Cola, entre otras cosas.
Tras él se encuentra la familia cántabra Álvarez Ribalaygua, dueña de tres hoteles de lujo en Santander y, sobre todo, de más de una docena de fábricas que producen buena parte del plástico que se consume en España. También la familia alicantina García Peralta, el primer fabricante de zapatos en España, o los catalanes Gomis Pintó, los gallegos Nogueira o los madrileños Mazin Mor que guardan sus ahorros en sicav.
También es notoria la entrada de Ignacio Sánchez-Galán, presidente de Iberdrola, y Santiago Eguidazu, accionista de la banca de inversión Nmás1. Se unen a la lista d directivos entre los que ya destacan Pablo Isla (Inditex), César Alierta (Telefónica), Ignacio Garralda (Mutua Madrileña), Francisco González (BBVA), Jordi Mercader (Miquel Costas), Ángel Corcóstegui (ex Santander) o Pedro Guerrero (Bankinter).
La gran caída este año no podían protagonizarla otros que los hermanos Benjumea. La crisis de Abengoa, ahora en un preconcurso de acreedores, redujo su patrimonio en más de un 90%. Tampoco figuran este año dos de las últimas víctimas del pinchazo de la burbuja: los hermanos valencianos Ballester y el histórico constructor y terrateniente andaluz Nicolás Osuna. También salió escarmentado Daniel Maté, ejecutivo y accionista de la minera Glencore, cuya crisis provocó que su patrimonio cayera 1.135 millones.
– Ver en Hechos de Hoy: Movistar, Zara y Santander, brillan en la lista de mejores marcas españolas