La crisis sanitaria ha tenido un impacto sin precedentes en el consumo de los españoles. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, esta partida registró una caída del 20,4% en el segundo trimestre de 2020, y se ubica en la actualidad en niveles similares a los del año 2005.
Esta situación ha tenido como contrapartida un incremento en la tasa de ahorro de las familias españolas hasta alcanzar máximos históricos, especialmente por precaución ante la incertidumbre laboral que está provocando esta situación, y que se sitúa por encima de nuestros vecinos comunitarios.
En concreto, los españoles ahorran más que sus vecinos franceses e italianos, una cifra que alcanza los 15.996 euros anuales per cápita frente a 9.576 euros y 11.618 euros, respectivamente, según se desprende de un estudio realizado por la fintech alemana Raisin.
La rentabilidad, la asignatura pendiente de los ahorradores españoles
No obstante, también somos los que más dinero tiramos por la ventana de toda Europa, con el 32% de nuestros ahorros en cuentas sin apenas rentabilidad, una situación que se ha agravado a causa de la pandemia de la COVID-19 y la necesidad de ahorrar por precaución, y ante la necesidad de asumir menos riesgo por nuestros ahorros.
En total, el dinero en depósitos, sin ningún tipo de interés, suma un total de 751.800 millones de euros, de manera que los españoles pierden 626 millones de euros en intereses cada mes, esencialmente tirando 21 millones de euros por día.
No en vano, según datos del Banco de España, el volumen de ahorro en depósitos ha aumentado un 10% en junio de 2020 en términos interanuales. En contraste, el patrimonio de los fondos de inversión domésticos ha caído un 2,83% en los últimos doce meses, según datos de Inverco.
Si se calcula per cápita, los ahorradores españoles mantienen en sus cuentas corrientes o depósitos a la vista unos 16.000 euros de media que no generan prácticamente ningún interés, y renuncian a una rentabilidad anual de 160 euros, equivalente a 10 libros, a una suscripción de casi dos años a Netflix o a una generosa donación a la causa que más te importe.
¿Por qué ahorramos?
La mayor motivación para ahorrar siguen siendo los gastos imprevistos. Según el último Informe Europeo de Pagos de Consumidores, elaborado por Intrum, dos de cada tres consultados señalan a este motivo como el principal objetivo de su ahorro. Los viajes son la segunda razón para ahorrar para dos de cada cinco, especialmente en el caso de los menores de 24 años, que son los que mayoritariamente reservan una parte de su dinero para este fin.
Por su parte, tan solo el 9% de los encuestados dedica sus ahorros para invertir en la compra de una vivienda, que antes de la crisis era la principal razón que explicaba las razones para ahorrar.
Eso sí, uno de los cambios positivos que nos deja esta crisis es que los españoles están buscando nuevas rentabilidades en fondos de inversión, con un 18% de los encuestados, y acciones de empresas (con el 13%), frente al 15 y el 11%, respectivamente, de hace tan solo un año.