Ciudad del Vaticano con rendición de cuentas en la sede en Europa, en Ginebra, de la Organizaciones de las Naciones Unidas. Francisco dio instrucciones a Silvano Tomasi para recalcar que la Iglesia quiere ser un modelo en la lucha contra los abusos a menores.

Por primera vez el Vaticano se posiciona en Ginebra ante el comité de expertos de la Convención de Derechos del Niño. Hay que recordar que el papa Francisco incorporó recientemente una serie de delitos al código penal del Vaticano, que se están aplicando ya en el proceso al arzobispo polaco Jozef Wesolowski, cesado hace unos meses como nuncio en la Republica Dominicana por abuso de menores. Un escándalo que sacudió Santo Domingo como informó Hechos de Hoy. Francisco anunció el mes pasado la creación de una Comisión de Protección de Menores, con expertos de todo el mundo, para avanzar en la lucha frente a un drama intolerable tanto en países pobres como los ricos.

El Vaticano admitió ante el Comité de la ONU sobre los Derechos del Niño que no hay excusa posible a los casos de explotación sexual y violencia contra niños, al tiempo que enfatizó que existen responsables de abusos "en todas las profesiones", incluso "entre miembros del clero y personal de la iglesia". Monseñor Silvano Tomasi, representante de la Santa Sede ante Naciones Unidas en Ginebra señaló que hay "abusadores entre los miembros de las profesiones más respetadas del mundo y, más lamentablemente, incluso entre miembros del clero y otro personal de la iglesia". 

Se trata de la primera vez que la Iglesia participa en un comité público sobre los abusos sexuales contra menores cometidos por sacerdotes en todo el mundo. Tomasi reconoció que la cuestión de los abusos contra niños es particularmente grave cuando se trata de personas que gozan de una gran confianza y están llamadas a proteger todos los elementos de la persona, incluida su salud física, emocional y espiritual. 

La ONU dedicó su sesión a evaluar la manera cómo la Santa Sede cumple los compromisos asumidos al ratificar la Convención de los Derechos del Niño. Tomasi sostuvo que el Vaticano ha delineado políticas y procedimientos para ayudar a eliminar los abusos sexuales, la prostitución infantil y la pedofilia y colaborar con las autoridades estatales respectivas para luchar contra este delito.

Al margen de las explicaciones de Tomasi, el Vaticano se ha negado a presentar un informe detallado exigido por el comité de la ONU sobre detalles de abusos sexuales a menores ocurridos en los últimos años en la Iglesia. Una actitud que ha sido criticada tanto por miembros del comité como por los activistas que luchan por el total esclarecimiento de los hechos y por lograr indemnizaciones para las víctimas.

Frente a los casos comprobados de abusos sexuales de menores bajo custodia o influencia de clérigos, la posición de las autoridades de la Iglesia ha sido que, cuando se comprueba la comisión de un crimen, éste debe ser castigado aplicando las leyes del Estado en el que han sucedido los hechos.