En los hechos de hoy, a destacar que Pedro Sánchez mantiene a Bildu como socio preferente en la actual legislatura. Ha decidido que la coalición de PSOE y Podemos no romperó con Arnaldo Otegi ni con Bildu. En solitario, sin Biden a su lado, se mostró descolocado y titubeante. En España, desde Toledo, el jefe de la oposición llamó a la rebelión de los votantes del PSOE.
La foto en la Casa Blanca le estalló a Pedro Sánchez en una breve rueda de prensa en el jardín del complejo presidencial en Washington cuando trató de responder a una pregunta sobre la inclusión de condenados de ETA en las listas electorales de EH Bildu.
“Hay cosas que pueden ser legales”, ha empezado su respuesta visiblemente incómodo. “Pero no son decentes y esta es una de ellas”, señaló..
“Creo que lo único que pueden aportar estas personas –en referencia a los condenados de ETA– a la vida pública es un mensaje de perdón, de reparación y de arrepentimiento”, algo que, por cierto,no ha hecho ninguno de los miembros de Bildu,
A partir de aquí y siempre en un tono muy poco convincente, Sánchez intentó incidir en el fin de ETA.
“Pero en todo caso y creo que esto es lo más relevante, lo más importante, es que hace ya más de una década, en concreto doce años, la democracia española derrotó a ETA y por tanto la labor de todos los responsables políticos, en primer lugar del Gobierno de España pero de todos los responsables políticos, es reconocer y respaldar a las víctimas del terrorismo”.
A partir de esta pregunta la intervención de Sánchez ha estado marcada por la visible incomodidad del presidente del gobierno, que ha llegado a tal punto que ha abandonado la rueda de prensa cuando los periodistas americanos querían hacerle preguntas en inglés.
Sus palabras sobre ETA han opacado también los otros anuncios que ha querido hacer Pedro Sánchez tras su reunión con Joe Biden, la primera en la Casa Blanca.