Por segundo año consecutivo ningún intérprete negro se encuentra entre los veinte nominados a mejor actor en los premios Oscar, ya sea en la categoría de protagonista o de reparto. Esta situación ha creado polémica una vez más ante la falta de diversidad entre los nominados seleccionados por los académicos.

Chris Rock, que presentará la gala de este año, los llamó “los Premios BET para los blancos”, haciendo referencia a los galardones otorgados por la Black Entertainment Television, mientras Will Packer, productor de Straight Outta Compton declaraba que la situación es “vergonzosa”.

A estas voces de alerta se ha unido la de Jada Pinkett Smith, actriz y esposa de Will Smith, que no ha sido nominado por su papel en La verdad duele, como así sucedió en los Globos de Oro, aunque no resultara vencedor.

Pinkett Smith publicó una serie de tuits el pasado sábado en los que incluso valoraba la posibilidad de que las personas de color dejasen de participar en los premios que otorga la Academia, vista la situación actual. La actriz ha dejado claro que hace todos estos comentarios desde el respeto pero con la más profunda de las decepciones.

“En los Oscar la gente de color siempre son bienvenidos para dar premios… incluso para entretener. Pero pocas veces nos reconocen nuestros logros artísticos. ¿Deberíamos la gente de color dejar de participar todos juntos? Solo nos pueden tratar como nosotros permitamos”, escribió tajantemente la actriz.

Pinkett Smith no está sola en lo que expresa. Tras las nominaciones de la semana pasada, el reverendo y activista Al Sharpton atacó a la Academia por pasar por alto a los actores negros. "De nuevo, actores y directores negros que lo merecían han sido ignorados por la Academia, lo que refuerza que hay muy pocos, si los hay, negros con auténtico poder en Hollywood", afirmó.

Este año, de los 20 nominados en las categorías de actuación en los Oscar no hay nadie de color. Además, en las películas nominadas que incluyen en su reparto a personas que no son blancas, solo los blancos han sido reconocidos con nominaciones. Si se quisiera buscar una excepción fuera de lo puramente caucásico, para Estados Unidos solo podría considerarse al mexicano Alejandro González Iñárritu, nominado a Mejor Director por El renacido.

La presidenta de la Academia de Hollywood, Cheryl Boone Isaacs, también ha hablado del asunto, afirmando: "Por supuesto que estoy decepcionada. Pero esto no les quita su grandeza [a las películas que están nominadas]. Ha sido un gran año para el cine, en todo el mundo".

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