Pirelli, proveedor de neumáticos del Mundial de Fórmula 1, lleva este fin de semana sus compuestos de la zona media de su gama al nuevo Gran Premio de Miami, que se disputa en un circuito urbano por las calles de la ciudad.
Según informó la compañía italiana, los pilotos dispondrán en la próxima cita de los compuestos 'C2' como P Zero Blanco (duro), 'C3' como P Zero Amarillo (medio) y 'C4' como P Zero Rojo (blando), lo que considera "la combinación más habitual de la temporada, y también de la más versátil" para un trazado con 19 curvas, tres rectas, numerosos cambios de elevación y una chicane.
"Se trata de la undécima sede de un Gran Premio en los Estados Unidos y esta vez es nueva para toda la parrilla. En Pirelli hemos tenido que recurrir a las simulaciones para confirmar nuestra gama de neumáticos para esta carrera. La información recabada nos recomienda optar por los compuestos de la zona media para esta cita de 57 vueltas, que contará con un asfalto liso y con un nivel de agarre razonable, además de unas fuerzas sobre las gomas que estarán en la línea habitual del resto de la temporada", advirtió la marca.
El misterio del lago
El extraño lago ficticio del GP de Miami que roba todas las miradas de cara a su estreno en la Fórmula 1. Es el factor añadido en el Autódromo Internacional de Miami.
La Fórmula 1 desembarca por primera vez en su historia en la ciudad de Florida para llevar a cabo el primer Gran Premio de Miami. Un evento que promete dar espectáculo no solo en la pista sino también fuera de ella, ya que asistirán grandes personalidades del deporte como LeBron James, Serena Williams, Michael Jordan y David Beckham entre otros.
Todas las miradas sobre el agua falsa en la que fueron colocados algunos costosísimos yates que recuerdan al lujoso GP de Mónaco.
Según las imágenes que se filtraron a través de las redes sociales se pudo ver un puerto deportivo construido alrededor de la pista que causó mucha repercusión, ya que en un primer momento se había confirmado que el Autódromo Internacional de Miami tendría un lago artificial.
Al no contar con salida al mar los organizadores decidieron improvisar. En las imágenes, a simple vista, se apreciaban aguas cristalinas que cubrían las curvas ocho y nueve del circuito estadounidense, pero todo resultaría ser un “puerto deportivo falso”, como lo describieron los usuarios.
Se esperanuna entrada de 80.000 èrsonas. El ticket más barato para todo el fin de semana está valorado en 1200 dólares. El paquete de “hospitality” para VIPS asciende a los 4.700 dólares. La opción Diamond, de entrada al Resort St. Regis Bal Harbour está en109.000 dólares. El puerto deportivo está instalado en la curva 8 y 9.