Noche de jueves en la que las parrillas volvieron en parte a su normalidad después de que el miércoles la mayoría de las cadenas emitieran programas especiales con la última hora de la monstruosa DANA en la Comunidad Valenciana.

El Hormiguero no se enfrentó a su rival, La Revuelta, y cogió aire con la visita de Belén Esteban. Al comienzo del programa, Pablo Motos se dirigió muy emocionado a los espectadores recordando que el es valenciano, de Requena, y mandó su apoyo a las víctimas de la DANA. “Aunque sea con un nudo en el estómago, esta noche lo vamos a pasar bien porque necesitamos todos coger un poco de ánimo, un poco de aire, para seguir adelante en medio de tanta angustia, tanto dolor y tanta desesperación”, afirmó el presentador. Tras la entrevista, en la tertulia, la valenciana Nuria Roca no pudo contener las lágrimas. El Hormiguero fue seguido por el 16,9% de la audiencia y contó con 1.972.000 espectadores. Son datos por debajo de los logrados en un día normal. Y es que estos no son días normales para nadie.

A continuación, nuevo batacazo de la serie Beguinas que cayó hasta un 6% con sólo 482.000 espectadores. En el prime time sólo fue la última opción. La semana pasada el capítulo protagonizado por Amaia Aberasturi y Yon González había logrado un 8,1%.

En Telecinco, Gran Hermano dividió su gala en dos partes. Jorge Javier comenzó, al igual que Pablo Motos, con un recuerdo a los afectados por la DANA. “En estos momentos tan difíciles, tan duros, haremos lo posible por entreteneros y sacaros una sonrisa. Un abrazo enorme y todo nuestro amor de todo el equipo del programa. Este aplauso lleno de amor es para todos vosotros”, afirmó al comienzo de la gala.

Una gala de Halloween realmente repugnante que registró mínimo de la temporada y también de este tipo de galas anuales del reality que otros años lo suelen petar. Entre vómitos y tartazos, la mayoría de los concursantes lo pasó fatal en el orfelinato. La expulsada de la semana fue Lucía ante el 16,9% de la audiencia y 834.000 seguidores.

Iker Jiménez y su equipo se pusieron el traje de faena y marcharon a Valencia para mostrar, de forma desgarradora, el sufrimiento de los habitantes de Paiporta, uno de los barrios más afectados por la riada. Horizonte, con Carmen Porter en el estudio, obtuvo su máximo anual, un 9,6% de cuota de pantalla. El programa finalizó a las dos de la madrugada, cuando ya los equipos se quedaron si batería. 691.000 espectadores vieron cómo Íker Jiménez se rompió y no pudo articular palabra al final de la emisión. “El programa es de todos, de todos los que han estado aquí, de todos los que han trabajado. De todos los que, desde los balcones nos decían que teníamos que contar lo que nadie cuenta. Hemos venido a contar y a saber lo que ocurre”, finalizó.

La 1, sin La Revuelta, emitió un programa especial informativo Tragedia por la DANA, seguido en el access prime time por el 9,1% de la audiencia y 1.086.000 personas. Después, 59 Segundos marcó máximo de temporada con un 8,3% aunque no pasó de 693.000 espectadores.

La tragedia de Valencia también fue analizada por el programa Conspiranoicos que logró máximo histórico con un 6,5% de share y 460.000 seguidores en Cuatro.