Todo es confuso y delicado. En cualquier momento puede estallar la tensión si el Talibán prohibe el acceso de afganos al aeropuerto de Kabul. Se respira un clina de enorme nerviosismo.
Joe Biden quiere la máxima protección para el aeropuerto de Kabul. Pero también libertad de movimientos en la capital para que todos los afganos que quieran abandonar el país puedan hacerlo. Estados Unidos mantendrá hasta el martes 31 de agosto un puente aéreo permanente entre Kabul y Washington.
El general Hank Taylor, vicedirector de Logística del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, reconoció que han podido operar sin “interacciones hostiles, ataques ni amenazas” por parte de las milicias fundamentalistas.
Estados Unidos confirmó una aceleración del ritmo de las evacuaciones de Afganistán, señalando que los talibanes que controlan Kabul no estaban interrumpiendo las operaciones en el aeropuerto.
Un alto funcionario del Estado Mayor Conjunto del Pentágono informó que militares estadounidenses en la terminal aérea se habían comunicado con los comandantes de las fuerzas del Talibán y que confiaban en que la salida de miles de ciudadanos estadounidenses y afganos en aviones militares estadounidenses continuaría en los próximos días.
“No hemos tenido interacciones hostiles, ningún ataque ni amenaza por parte de los talibanes”, aseguró el general Hank Taylor.
Desde la reapertura del aeropuerto de Kabul la madrugada del martes, después de un cierre de varias horas por problemas de seguridad, Estados Unidos ha evacuado a unas 800 personas, de las cuales 165 estadounidenses, en siete vuelos, indicó Taylor.
El Departamento de Defensa ha enviado tropas al aeropuerto de Kabul desde el sábado para proteger la salida de personas. Taylor confirmó que el número de soldados estadounidenses aumentaría de 2.500 el lunes a alrededor de 4.000 el martes por la noche.
El objetivo de Estados Unidos, indicó, es aumentar los vuelos a un avión por hora para poder transportar entre 5.000 y 9.000 pasajeros por día. “Hemos tomado las medidas adecuadas para reanudar operaciones seguras y ordenadas en el aeropuerto”, apuntó.
Otros países, incluidos Alemania y Francia, también han podido aterrizar aviones en Kabul para recoger a sus nacionales y afganos calificados.
Taylor habló un día después de que circularan imágenes de cientos de afganos en la pista del aeropuerto de Kabul tratando de impedir la salida de un enorme avión de transporte militar pesado C-17, aferrándose al exterior de la aeronave.
Los videos parecían mostrar a dos personas cayendo desde el avión después de que despegó. Otro, según The Washington Post, fue encontrado más tarde muerto en el tren de aterrizaje. El portavoz del Pentágono, John Kirby, dijo que la Fuerza Aérea de Estados Unidos estaba investigando esos incidentes.
Taylor no proporcionó cifras sobre cuántas personas, ciudadanos estadounidenses, afganos u otros nacionales, se encontraban actualmente en el aeropuerto de Kabul tratando de abandonar el país. Estados Unidos se ha comprometido a aceptar a decenas de miles de personas que trabajaron para las fuerzas estadounidenses y a sus familias, quienes temen represalias de los talibanes.
Más de mil han sido evacuados desde que comenzaron las operaciones hace tres días. “Los talibanes nos han informado de que están dispuestos a proporcionar el paso seguro de los civiles al aeropuerto, y tenemos la intención de hacerles cumplir ese compromiso”, manifestó el consejero de Seguridad Nacional, Jake Sullivan, a los periodistas en la Casa Blanca.
Sullivan dijo que Estados Unidos también estaba “hablando” con los talibanes sobre el calendario para el traslado de los civiles estadounidenses y afganos.