Vuelve a ser noticia. El atleta paralímpico Oscar Pistorius, acusado de la muerte de su novia en febrero del 2013, fue expulsado de una discoteca el pasado sábado tras protagonizar una pelea con otros clientes del local, según ha informado este martes el diario de Johannesburgo The Star.

Asimismo, el mismo medio aseguró el deportista iba borracho. El cliente agredido, Jared Mortimer, relató que Pistorius le agredió tras insultarle e insultar al presidente del país, Jacob Zuma, y a su familia. El incidente violento fue confirmado por la portavoz del atleta, Anneliese Burgess.

Asimismo, también argumentó que el atleta paralímpico reaccionó así tras haber sido "agresivamente interrogado" sobre cuestiones relativas al juicio. Según la misma publicación, Pistorius se encontraba el sábado en el área VIP de una discoteca de moda de la capital sudafricana, donde un conocido le presentó a Mortimer.

Éste explico que el atleta empezó a criticar a algunos amigos en común por no haberle apoyado durante todo el proceso judicial. "Íbamos a tomar un tequila, pero dije que no podía beber escuchando tales cosas de mis propios amigos", comentó. Fue entonces, cuando el atleta se enfadó y empujó a Mortimer por el pecho.

"Se acercó a mi cara y yo le empujé para alejarlo. Tropezó con una silla y cayó al suelo", explica. Por su parte, la portavoz del atleta, Anneliese Burgess confirmó el incidente aunque ofreció una versión totalmente distinta. Según dicha versión, Mortimer se acercó a Pistorius y "empezó a interrogarle agresivamente sobre temas relacionados con el juicio".

Ante dicha situación, añade que el atleta reclamó a Mortimer que le dejara en paz y al poco abandonó el local con su primo. Burgess destacó que Pistorius "lamenta haber acudido a un espacio público y haber llamado la atención".