En el mundo agitado de buscadores e información que se escupe rápida -la frontera de los 17 segundos-, P. D. James (Phyllis Dorothy James) puede decir poco a las nuevas generaciones. Fue, sin embargo, la heroína del misterio.

Nació y murió en Oxford pero no podo huir a la universidad que hubiera sido su gran ilusión. Su padre no se lo pudo permitir. Funcionaria, desembarcó en la intriga con 40 años. Descubrió una pasión que nunca abandonó.

Tras hacerse pública su muerte, el primer ministro británico, David Cameron, dejó en Twitter sus impresiones. "Entristecido al saber de la muerte de P.D. James, una de las más grandes escritoras del crimen en el Reino Unido, que emocionó e inspiró a generaciones de lectores", fue su tuit de homenaje.

P.D. James, fallecida a los 94 años, fue autora de obras como Un impulso criminal, Muertes poco naturales, Intrigas y deseos, Mortaja para un ruiseñor o Muerte de un forense. La editorial Faber & Faber, que publicó sus libros desde su primera novela, en 1962, la definió como una persona "excepcional, una inspiración y una gran amiga para todos".

"Fue una persona excepcional en todos los aspectos, una inspiración y una muy buena amiga para todos nosotros. Para Faber & Faber ha sido un privilegio poder publicar sus libros", señaló la editorial. "Trabajar con ella era muy divertido, era una persona llena de alegría, y la echaremos mucho de menos", destacó Faber & Faber. P.D. James, que tenía el título de baronesa, publicó numerosas novelas, la mayoría protagonizadas por el detective Adam Dalgleish. Creo un personaje delicioso, un detective que escribia poesía y amaba el jazz. Tenía una pasión especial por la carretera, pero, claro, al volante de un Jaguar.

Críticos literarios destacaron a Hechos de Hoy, lo excelente de descubrir su pulso literario, la descripción de los escenarios, y el retrato sutil de las piezas que encajan en un drama. Surge así una atmósfera de misterio, intriga y crimen que acaba atrapando.