Pedro Sánchez voló la investidura antes de su celebración. Negó cualquier posibilidad al pacto alcanzado por 170 diputados (Partido Popular, Ciudadanos y Coalición Canaria).
Serán estériles todos los debates. Una semana tirada a la basura la del martes 30 de agosto al viernes 2 de septiembre. Ninguna química entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez. Ninguna esperanza de acuerdo.
Pedro Sánchez fue especialmente cortante tras lo que calificó como reunión "perfectamente prescindible". "Éste no es nuestro acuerdo, perpetúa las políticas de desigualdad y no resuelve la exigencia de regeneración democrática que se pide al país", sentenció asegurando que la investidura es la "crónica de una derrota anunciada".
Las espadas siguen en alto. El sanchismo tomó el control del PSOE y no cederá. Susana Díaz permanece en la sombra. El pacto entre ambos puede ser una salida. El riesgo de escisión permanece.
¿Qué sucederá ahora? Los detalles van a ser muy importantes. Si el pacto de 170 mantiene su cohesión, pueden abrirse otros escenarios a partir del viernes 2 de septiembre. El Rey Felipe VI sigue los acontecimiemtos con fuerte preocupación. Em juego ya están muchas cuestiones que afectan al bien común. Mariano Rajoy lo subrayó, sin dramatismo, pero de forma gráfica y vehemente.
– Ver en Hechos de Hoy, Albert Rivera, un modelo de gestión sin vetos ni líneas rojas.